La regulación de las finanzas sostenibles sigue evolucionando a un ritmo vertiginoso y el 2022 seguirá con la tendencia del año pasado; la inversión sostenible está madurando, al igual que la regulación, la divulgación y los debates que la rodean. Así lo afirma Andrew Howard, responsable global de inversiones sostenibles de Schroeders en un artículo recientemente publicado.
Ya no hay excusas para la sostenibilidad
Según un análisis de Bloomberg, los activos ASG (medio ambiental, social y de buena gobernanza) se dispararon hasta alcanzar una cifra sin precedentes:
2021 – 37,8 billones de dólares
Y se prevé que crecerán hasta constituir un tercio de todos los activos mundiales gestionados:
2025 – 53 billones de dólares
El impacto de las empresas en la sociedad y el medio ambiente no es sólo una cuestión académica, sino que es un asunto cada vez más tangible. La conexión entre el retorno de las inversiones y los resultados sostenibles es cada vez más profunda y sólida.
